Viaje por la historia de Cúllar a través de los ojos de quienes han sido testigos del paso del tiempo en estas tierras

jueves, 28 de noviembre de 2013

Mi infancia en Cúllar II.

En invierno los días fríos en Cúllar, camino de la escuela, con lluvia frío y nieve pero todos-as con nuestra lata de la conserva  de las grandes, llena de ascuas para poder combatir el frío que hacia en la escuela, que ya sabemos todos como son los inviernos en Cúllar, nuestro querido pueblo.

Y las mujeres, como se las apañaban para lavar la ropa , en el río porque todavía no tenían el lavadero, se tenían que ir a la choza que había en Rozimir, donde esta hoy el puente de la autovía , allí nacía un buen chorro de agua, y ya tenían colocadas unas losas de piedra para poder enjabonar la ropa, algunas tenían una losa de madera, igual se pasaban el día entero, hasta con merienda, pues además de lavar tenían que tender la ropa para que se secara al sol, una vez seca la recogían la doblaban y para la casa.

Cuando era el tiempo de vacunar a los niños, recuerdo que nos reunían en una plazoleta del barranco y en plena calle con un brazo desnudo nos ponían la vacuna, y días más tarde, cuando se nos caía la cortecilla de la pupa que nos salia, presumíamos quien tenía la marca más grande.

Y en carnaval, en era del tío Amolao, los que se vestían de mascara con la cara tapada ¡cosa  prohibida !, con un almohada en el trasero , pues era costumbre que los zagales y los más grandecillos que fuéramos detrás de las mascaras para darles buenos garrotazos con las varas que cada uno llevaba para tal acción (cosas de críos)  y si aparecían los guardias civiles todo el mundo desaparecía hasta que se iban, cuando se marchaban todo volvía a ser. Lo que era una fiesta del pueblo.                                                                                                                                                                                              

El día a día de un cartero en los años 70


Cuando llegué a Cúllar aproximadamente en el 68 al final, tomé posesión en la oficina, la jornada laboral la teníamos mañana y tarde, por mañana siempre estaba en la oficina admitiendo giros, paquetes , certificados, ect, haciendo despachos para que salieran el mismo día a toda España, el material que teníamos en la oficina eran impresos de Correos y una máquina de escribir,  un   mata  sellos y un mortero  con tinta  de  correos, en aquellos tiempos se hacían muchas sumas y había que hacerla con la cabeza.

Por la tarde atendiendo los enlaces de Murcia, Baza y Orce, el reparto que tenía era: Rafael Jofré, Mata, Horno, Vendo, Empedrada, Eras, San Agustín, Plaza Barranco, Barranco 1º, Barranco 2º, Barranco 3º , Olivar Bajo y Alto y todo el Barrio Buena Vista.

En aquellos tiempos estaban todas las mujeres en la calle cosiendo trabajos manuales y otras cosas propias de la casa, también esperando que pasara el cartero ya que en aquellos tiempos repartíamos muchas alegrías, hijos que se encontraban haciendo el servicio militar, la familia en la vendimia..., así que el cartero era como familia, ahora cuando me ven por la calle les da alegría, y para mi es un gran honor haber estado tanto años al lado de ellos, es una gente buenisima y jamas he tenido un mínimo problema.

Costumbres de Cúllar: Esparto y Feria

En Cúllar también teníamos otras actividades como era el esparto, a pesar de ser unos de los trabajos más duros de todos los mencionados, era el pan de cada día para muchos cullarenses, porque no a todos se le daba bien este trabajo, si recuerdo que había muchos que eran muy buenos, aunque creo que a esta alturas van quedando pocos, pues la mayoría de ellos ya no existen, de todos modos aunque poco pero se sigue haciendo .

Cúllar también ha sido un pueblo que ha emigrado mucho, pues con el tiempo siempre ha ido perdiendo habitantes,  la prueba está en las estadistas, de los años cincuenta el censo de casi 11000 habitantes hoy en en día si no me equivoco somos unos 5000, esperamos que se quede así.

Fiesta en aquellas fechas teníamos la Feria, que era muy famosa porque venían animales de todos los contornos, sobretodo los mulos, me acuerdo de los tratos que los marchantes hacían, cosa que yo siendo un crío me hacia mucha ilusión.

También venían muchos circos, teatros con aquellos payasos tan famosos que tanto nos hacían reír, en la Plaza se llenaba de casetas de todas clases turrón, de regalos, de los caballitos, estos también nos hacia mucha ilusión, pues yo para poder disfrutar de todo esto me iba a la Feria de las Eras vendiendo agua  de la kikuta a perra-gorda la panzá como solíamos decir, esto durante todos los días y por la noche nos íbamos a disfrutar de la Feria hasta donde podíamos llegar .

La pena de todo esto es que hoy en día casi se a perdido.  

Receta del Tio Gines

Voy a contaros mi historia tal y como yo la he  vivido, soy una persona metida en años, aunque soy de tez morena siempre he padecido de sabañones en las orejas, en el invierno conforme han ido pasando los años fue en aumento, y hace unos años fue muy mal, creí que se me podrían las orejas. Fui al médico varias veces y no encontré mejoría alguna, y un buen día me encontré con mi vecino Ginés un hombre mayor, me preguntó porqué llevaba las orejas tapadas, le conté todo lo que me pasaba y entonces me dijo lo que tenía que hacer para que se me quitaran, consiste en una cosa muy sencilla:
Cuando nos lavamos la cara, en las orejas nos echemos el agua todo lo caliente que podamos aguantar pero sin quemarnos, como es natural, si ya los tenemos, bien, y si no los tenemos, mejor, si puede ser durante todo el año y si no cuando empiece el invierno, a mi me fue muy bien, espero que a vosotros también os vaya bien,y todo esto gracias al Tío Gines.

martes, 26 de noviembre de 2013

Cuando llegué de cartero a Cúllar en 1968

En  los barrancos  1º, 2º y 3º   sólo  estaban   las calles   asfaltadas  los que  vivian   en  primera  linea,   lo demás eran veredas   de  tierra  que cuando  llegaba  el  invierno era  casi  imposible  repartir  las  cartas,  más  de una  vez  llegue  a  caerme.

El   ambiente   era  buenísimo,   las  señoras  salían  a las  puertas  que  casi  siempre  se las dejaban  abiertas,  se  juntaban  a coser  y hacer  manualidades  y  como  no  a  contar  chistes ,  en aquella  época  había  menos  de  todo,  pero si que  la gente  estaba  más  alegre  y más  comunicativa.

La Feria de Cúllar

De  mi infancia y adolescencia tengo unos recuerdos imborrables de la Feria de Cúllar, mi padre tenia el negocio en pleno centro de aquel acontecimiento, se comentaba que era  la mejor feria de Andalucía  y seguro que de España.

Venían aquí a comprar ganado marchantes de toda España, el pueblo recibía  una inyección de dinero enorme, el pueblo entero alquilaba sus casas, sus cuadras y sus camas de tanta gente que venia. También   había mucha divérsion con circos, teatros y muchas casetas de turrón otras de venta de oro y otras bisuterías y muchas mas cosas, las diversiones de ese tiempo era salir la familia a comer turrón de caseta en caseta y por la noche a comer churros y chocolate y al circo que entoces eran muy buenos.

A las 6 de la mañana estaba la Plaza de abajo completamente llena al estilo que se pone ahora en la fiesta de los moros, solo eran marchantes preparando sus tratos que después culminaban en las Eras, también  empezaba a esa hora las ventas en la plaza y las carnicerías, mi padre tenia una y paso una foto, también venían muchos rateros de fuera y más guardia civil de paisano, para resolver estos conflictos.


Costumbres de Cúllar: La agricultura.



En aquella época solo había un medio de vida que era la agricultura, esto para el que tenia fincas y para los demás era echar jornales, porque en esa época se criaba muchas remolachas las cuales necesitaba mucha mano de obra y el proceso de esta cosecha era de marzo hasta noviembre o diciembre que era el tiempo de recolección .

Después venía la cosechas de los cereales, que era la más larga y la mas dura porque ésta se hacia toda a mano por no haber las maquinarias que hoy tenemos y digo la más dura porque la siega se hacia durante el día soportando unas temperaturas muy altas. Yo me acuerdo de mi infancia, que tendría unos 7 0 9 años, que estaba en casa de mis abuelos y me mandaban a llevarles a los segadores el gazpacho, el cual lo recibían muy bien porque les refrescaba bastante y más tarde sobre las dos o las tres de la tarde la famosa olla que en esos tiempos se hacia, la cual era bastante fuerte ya que se hacia con bastante grasa pues era todo cerdo pero muy rica.

A continuación venía la famosa trilla, ésta ya era más suave también bastante calor, era más llevadera ya pues aquí se rebelaban para ir trillando por lo estaban más descansados .
Y partí de los años sesenta y ochenta empezó la emigración que la verdad sea dicha, la vida empezó a cambiar algo...


... continuará ...

El cultivo de la remolacha azucarera.


Tal y como yo lo he conocido en los años cincuenta a cincuenta y cinco, era un producto muy rentable en este pueblo y en toda la comarca, por las buenas tierras que hay y la abundancia de agua que existía aquellos tiempos.

Se preparaba la tierra, se labraba bien de enero a febrero se regaba y a primero de marzo se sembraba, todo se hacia a mano por eso necesitaba  mucha mano de obra, explicarlo con detalles se haría muy largo, nacían en unos quince días aproximadamente, cuando estaban de unos seis centímetros  se empezaba a quitar la hierva y a mover la tierra, se repetía esta faena dos o tres veces en toda la primavera,y a primeros de mayo se clareaban del todo dejándolas de unos treinta centímetros aproximadamente, teniendo en cuenta que solo quede una sola planta, y a primeros de verano se empezaba a regar cada quince o veinte días, hasta mediados de septiembre, y a mediados de octubre se arrancaban, se llevaban a la bascula que había dos una para la fabrica de Caniles y otra para la de Benalua de Guadix.

jueves, 21 de noviembre de 2013

La educacion en Cullar en los años 55 a 65

En estos años yo empecé a asistir a la escuela, las cuales eran para niños y niñas por separado, éstas estaban repartidas por todo el pueblo y sus anejos, a los  profesores se les llamaban maestros, los cuales nos enseñaban,nos educaban y nos cuidaban, pues en los recreos nos preparaban la leche en polvo, queso y la mantequilla que el gobierno Americano mandaba al Español y éste lo enviaba a los Colegios Públicos donde los maestros nos la preparaban y repartían.

La enseñanza era muy diferente a la de hoy , teníamos  una enciclopedia que
contenía todas las asignaturas. Hacíamos muchos problemas, cuentas y dictados y se daban las lecciones de memoria, además teníamos una pizarra y un pizarrin para las cuentas,  pues el papel escaseaba mucho, teníamos escuela por la mañana y por la tarde ,y se hacian tareas de todo tipo incluido costura.

Se les tenía mucho respeto a los maestros y yo quiero mencionar a los que a mi
me enseñaron que fueron Doña Pepita, Lolita, y Margarita Molina, eran las tres
hermanas y a las cuales recuerdo con mucho cariño y afecto.

¡Como ha pasado el tiempo! .Estoy escribiendo y tengo nostalgia de aquellos años tan felices para mi , jugábamos todos los amigos tanto en las calles a todos los juegos  que había en aquellas fechas, que eran muchisimos y así trascurrió mi niñez en una época muy diferente a la de hoy.

suscribe Angustias Sánchez Salvador

Evolución del hombre al paso de los años

Cúllar hace muchos años, Cúllar,  era un pueblo muy poblado y de diversas actividades y profesiones, la principal la agricultura, se cultivaba el trigo como base principal para asegurar el pan del año, después la remolacha azucarera era una fuente de ingresos importante, la aceituna era y sigue siendo el cultivo mas rentable.

Con el paso de los años llego la emigración y la gente empezó a salir a las regiones más industrializadas como Barcelona y el País Vasco, y el pueblo fue creciendo en estructuras y menguando en habitantes, y se perdieron algunos  oficios como los alfareros, obradores de espalto por que ya no eran necesarios. 

Costumbres de los cullarenses

Las costumbres de los cullarenses antiguamente eran las siguientes: en verano en todas las calles o barrios por la noche se juntabas todos en la calle cada uno con su sillas para tomar el fresco, una costumbre que en la fecha de hoy casi se ha perdido.

Otras más en las Navidades, la Noche Buena era costumbre de ir casa por casa para pedir el aguilando.

En la Semana Santa todos íbamos a la Iglesia para oír los sermones que nos daban, ya que en aquellos tiempos todos los bares y cines estaban cerrados hasta el sábado de gloria.

En verano en tiempos de la recogida de la cosecha, pues se ayudaban unos a otros lo mismo que en la campaña de la remolacha y muchas actividades más
y así en todas las campañas, cosas que hoy en día casi se han perdido.

De las muchas costumbres que había, algunas van quedando, como ir a la Kikuta para llenar garrafas de agua para el consumo.

Historias de Cuĺlar

 Mi padre me contaba en mi infancia y años después de la importancia que tenia el pueblo de Cúllar en ese tiempo llegó a tener 12.000 habitantes y mucho negocio con el esparto y eso gracias a las buenas comunicaciones que tenia con el levante y sobre todo con Murcia.

Mi infancia en Cúllar

No se por donde empezar,pero creo que como todas las cosas empezare mis vivencias por el principio.
    Corría el mes de febrero del año 52 del siglo xx cuando nací en una cueva del barranco 2º en CULLÁR un pueblo de la provincia de GRANADA.
     Mi infancia la recuerdo que vivíamos muy agusto , con toda la familia, reuniones los domingos y festivos , matanzas del marrano ,los mantecados para la pascua ,recuerdo que mi madre amasaba todas las semanas y yo era el encargado de bajar a la plaza del barranco y avisar a DOLORES la del horno ,que a la mañana siguiente mi madre bajaría la tabla del pan para cocerlo en el horno. También me encargaba del agua ,pues con 7 u 8 años casi cada día tenía que ir a por una carga de agua a la KAIKUTA, con la burra y 4 cantaros cada viaje "cuando no se me rompía alguno". Después de  salir de la escuela me bajaba al río con mi chotilla la ataba y a jugar con los demás  zagales del barrio hasta que oíamos a nuestras madres que nos llamaban a grito pelao  .Así transcurrían nuestras  vidas ,felices sin preocupaciones .
     Hasta que llego el año 63 , mes de marzo cuando empezó a cambiarnos la vida .

Antes de seguir, me vienen otros recuerdos,cuando hice la primera comunión .

   Mi primera ropa nueva  echa para mi , zapatos nuevos, todo un acontecimiento, la ilusión de la ropa nueva, era por que siempre mi madre aprovechaba, lo que a mi hermano mayor se le iba que dando pequeño , o de algún primo , de la familia que teníamos en Francia a los que solo conocía en foto, y los juegos con los amigos se nos pasaba el tiempo volando , con nuestros carros de carga y piaras de caballos mulas y muletos que no eran otra cosa que una caja de zapatos con un cordel de esparto que me hacia mi abuelo PEPE y la piara de animales eran las asas de los cantaros y botijos que se le rompían a CIRIACO el de los cantaros, casi todos los días me pasaba por la alfarería por si se le avía roto alguno.

     Y la CIPRI , la tejedora de ja rapas ,la hija del tío GREGORIO el FARRUCO y la abuela de nuestro actual alcalde , allí sobre todo en invierno nos pasábamos las horas viendo todo lo que allí se hacia , pues parecía un taller de oficios ,carpintería ,tejedora, hasta músicos,pues menudos bailes que se organizaban en el barrio ,CIRIACO CON SU GUITARRA el tío GREGORIO  con otra y su hijo AGUSTÍN  con la bandurria ,así de bien se lo pasaban los vecinos de mi barrio , con poca cosa pero felices.

El Agua en Cúllar

Antes de tener la red de agua potable en Cúllar, había varios sitios donde ir por el agua: La Kicuta , el Lavadero el Chirimuza  y un caño que había  en  donde está la actual biblioteca,  con sus respectivos pilares, en los cuales se llevaban a abrevar  a las bestias después de su jornada de trabajo y normalmente eran los
niños los que las llevaban los mas pequeños iban a los pilares en los que no tenían que atravesar la carretera.

Cuando te ibas haciendo un poco mayor tenias que ir a llenar los cantaros  con
la burra con sus agüeras para tener agua en casa.